Continuamos nuestra campaña sobre las 7 Mentiras del ELA con la próxima falacia expuesta por el PPD:

El ELA es una entidad política autónoma

El Congreso de los Estados Unidos tiene poderes plenos sobre Puerto Rico y los territorios debido a la cláusula territorial. Algunos populares te harán pensar que son solo ciertas partes del ELA pero la realidad es que el Congreso americano tiene la última palabra. La premisa del segundo punto impulsado por el PPD viene con la noción de que la autonomía en el ELA pueda desarrollarse, algo totalmente falso.

El diccionario de la Real Academia Española define la palabra autónomo como “que trabaja por cuenta propia” y autonomía como “condición de quien, para ciertas cosas, no depende de nadie”. ¿A caso Puerto Rico cae bajo esas definiciones? Los estadolibristas te harán pensar que sí, que no tan solo somos autónomos, pero que esa autonomía tiene espacio para crecimiento sin cambiar la relación con la Nación. Aquí entra la pugna que los estadistas disfrutamos entre los llamados “muñozistas” y los soberanistas.

Los “muñozistas”, comúnmente acusados como estadistas “light”, argumentan por más derechos como el voto presidencial y la inclusión de Puerto Rico en todas las leyes federales con el consentimiento de la legislatura local (impulsado en los 90s por Eduardo Bhatia). Los soberanistas por otro lado quieren que Puerto Rico se separe del poder y administración del Congreso y permanecer en un compacto internacional, aun manteniendo la relación en términos monetarios y militar. Tenemos que hablar de ambos ya que aún no sabemos qué camino va tomar el PPD bajo el liderato de García Padilla. Estos llamados desarrollos son irreales o hasta inconstitucionales. Un compacto federal ya estaría violando el Artículo IV, sección 3, clausula 2 de la Constitución Americana. Y segundamente, las leyes federales, siempre y cuando estén bajo los poderes enumerados del Congreso, aplicarían a los estados aunque no deseen. Los estados no pueden acogerse a las leyes que les conviene solamente. Podrían argumentar soberanía estatal bajo la décima enmienda para oponerse de leyes federales (como por ejemplo las decenas de estados luchando en contra de Obamacare) pero leyes cuya constitucionalidad se cuestiona surgen con menos frecuencia. El PPD aunque siempre marcha con un doble discurso, tiende a unirse para acusar al PNP de definir “incorrectamente” el Estado Libre Asociado. Cada vez que se acerca un plebiscito o algún intento fuerte para trabajar el estatus, el PPD siempre acusa a la mayoría PNP de distorsionar la definición territorial incluida en los procesos iniciantes de consulta. Sin embargo, el PNP siempre ha incluido la definición tal y como define la Corte Suprema de los Estados Unidos:

“The Congress shall have Power to dispose of and make all needful Rules and Regulations respecting the Territory or other Property belonging to the United States; . . . “ (Art. IV., Section 3, clause 2).

Es tan fácil como leer nuevamente las dos líneas previas para entender que el Estado Libre Asociado no tiene desarrollo ya que responde a lo que diga el Congreso. Como bien sabemos, el PPD luchó en los tribunales alegando que el rehúso de la legislatura en permitir que el PPD escribiera su propia definición para la papeleta violó los derechos políticos y libertad de expresión del partido. Sin embargo, después de sufrir un revés en su demanda, el partido decidió instar a los puertorriqueños a votar por una quinta opción en la papeleta: “Ninguna de las anteriores”.

Es importante para los estadistas parar de considerar el Estado Libre Asociado como un estatus legítimo. El ELA es una glorificación de una ley como cualquier otra. Donde en un momento de crisis o cambios fundamentales en el Congreso puede cortar la relación por completo si desean. El segundo punto impulsado por Alejandro García Padilla sugiere que el ELA puede hacer lo que desea políticamente. Dentro del ELA sí, se puede legislar, pero siempre bajo un marco establecido por el Congreso que prohíbe cualquier tipo de interferencia y la hace regir por lo que disponga el Congreso. Como mencione anteriormente, la premisa del segundo punto impulsado por el PPD viene con la noción de que la autonomía en el ELA pueda desarrollarse, algo totalmente falso. El ELA no es desarrollable como han dicho los últimos tres task-force presidenciales.

Para ir finalizando, les presento un listado de organismos dentro del gobierno federal que ha definido el estatus como territorial y sujeto a los poderes plenos del Congreso:

• Departamento de Estado y Departamento de Justicia Federal bajo la Administración Clinton: “PUERTO RICO ES UN TERRITORIO Y ESTÁ SUJETO A LOS PODERES PLENARIOS DEL CONGRESO”.
• Departamento de Estado y Departamento de Justicia Federal bajo la Administración Bush: “PUERTO RICO ES UN TERRITORIO Y ESTÁ SUJETO A LOS PODERES PLENARIOS DEL CONGRESO”.
• Task Force de Casa Blanca Administración Bush: “PUERTO RICO ES UN TERRITORIO Y ESTÁ SUJETO A LOS PODERES PLENARIOS DEL CONGRESO”.
• Departamento de Estado y Departamento de Justicia Federal bajo la Administración Obama: “PUERTO RICO ES UN TERRITORIO Y ESTÁ SUJETO A LOS PODERES PLENARIOS DEL CONGRESO”.
• Task Force de Casa Blanca Administración Obama: “PUERTO RICO ES UN TERRITORIO Y ESTÁ SUJETO A LOS PODERES PLENARIOS DEL CONGRESO”.
• Comités y el Pleno de la Cámara de Representantes Federal: “PUERTO RICO ES UN TERRITORIO Y ESTÁ SUJETO A LOS PODERES PLENARIOS DEL CONGRESO”.
• Comités del Senado Federal: “PUERTO RICO ES UN TERRITORIO Y ESTÁ SUJETO A LOS PODERES PLENARIOS DEL CONGRESO”.
• Congressional Research Service: “PUERTO RICO ES UN TERRITORIO Y ESTÁ SUJETO A LOS PODERES PLENARIOS DEL CONGRESO”.
• Tribunal Supremo de Estados Unidos: “PUERTO RICO ES UN TERRITORIO Y ESTÁ SUJETO A LOS PODERES PLENARIOS DEL CONGRESO”.

En conclusión, no habrá verdadera autonomía a menos que sea a través de la estadidad o la independencia.

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